El furancho da Formiga es uno de esos lugares míticos de Redondela, que lleva media vida sirviendo vino y raciones de comida en un lugar increible.

Llegar es muy fácil ya que se encuentra en la carretera que une Redondela con Rande. A mitad de camino, más o menos, a la altura del número 55 se encuentra el furancho. Si vienes desde Redondela está pasando el furancho A Cunca do Viño al final de la larga recta que hay en la carretera N-552. Está en una curva con muy buena visibilidad y es muy sencillo encontrarlo. No disponen de aparcamiento propio pero sí tiene bastante sitio fuera para poder dejar el coche.

Se trata de un furancho con una parte cubierta en una bodega interior y el resto con mesas de piedra en el exterior. En la bodega hay mesas amplias y el ambiente, rodeado de alambiques, cubas y barriles de vino, es muy furancheiro. La parte exterior tiene numerosas mesas, todas de piedra, con bancos hechos de troncos. Se trata de un sitio muy agradable, que aún estando cerca de la carretera, ofrece un remanso de paz para disfrutar de una buena mesa.

Tienen blanco del país y albariño que están buenos y de comida sirven lomo, zorza, pimientos, tabla de embutidos, oreja, chorizo y una especial mención a su tortilla de patatas, está riquísima. También ponen algo de queso de tetilla con membrillo.

Este furancho es una muy buena opción si quieres comer al aire libre, en un sitio fácil de encontrar y cómodo de llegar.